Ojalá II

Vivir mola.

Vivir mola aunque solo tenga ganas de defenestrarme, arrancarme los ojos irritados fruto de esta primavera que no termina de llegar ni de irse y eliminar esta fiebre que hace que me mueva tan lento que parece que camino sobre la superficie lunar. Un día tremendamente bonito que de repente se complica y ¡zas! en toda la boca. Aun asi, pretendo sentarme y escribir algo coherente y lleno de optimismo, porque sí, pese a todo y a todos. Asi soy yo: superficialmente profundo y un completo gilipollas estupidamente feliz.

Este fin de semana pasado, huida numero 2 del año: Madrid. De nuevo una ciudad increible que me abraza. Tengo demasiados buenos amigos viviendo por esos lugares, gente que me hace sentirme en casa. Y me descubro cogiendo el metro como si cualquier cosa y sonrio a cualquiera que me aguante la mirada. Tambien es verdad que la entrada en la ciudad esta vez no fue por la puerta grande si no con el modo estupido on. Me dejo olvidada la bolsa que llevaba con unos vaqueros y unos calzoncillos para aquel que me acogia en su casa, mandado por su novia (futura medico ella). El caso, que llegaba tarde a un concierto que me puso el vello de punta. Era como tener delante a ese hombre que ha puesto musica a muchos momentos de este año pasado y que no deja de sorprenderme ni deja de sorprenderme el hecho de que la gente se sorprenda porque exista alguien asi. Oh gran David Fonseca, gracias. Gracias por vestirte de astronauta y por tener una guitarra tan sumamente bonita, por llevar un ukelele electrico. Y la sala Heineken no tenia cerveza cuando yo llegué. Pero una mano desconocida me puso un mini (o maceta o litro o yoquese) en la mano en el momento justo. Kiss me, oh, kiss me. (A., un placer conocerte en persona aunque no fuese capaz de decir nada coherente... Y al salir de alli de repente en una calle cualquiera camino de Malasaña aparece una alfombra roja tentando al desenrollamiento, logicamente. Uno que es asi caminó sobre la alfombra roja y se metio de garito en garito hasta que perdió su jersey rojo de rombos tan bonito regalo por sus 24 eneros ya no tan recien estrenados. Y cuando ya amanecía volvió haciendo ochos de camino a "casa". Y al día siguiente, tirado al solecito en Lavapiés. Cervezas, comida en un bar...mmm... kurdo pero con camarero pakistaní. Todo muy rico. Posterior té en una teteria, un barrio increible, en serio. De hecho hacia mucho tiempo que no veia a los niños jugar a la pelota en las plazas del barrio, todo perdidas, esta juventud que prefiere la videoconsola a la rayuela, el ordenador al pilla-pilla. Luego vendria la visita obligatoria al Retiro y su Ángel Caido, una cena exquisita en un restaurante chileno por la zona de Moncloa que se llama 8 de Mayo (muy recomendable por el buen trato y lo rico que está todo). Y sí, soy de comida picante, lo reconozco, pero nadie es perfecto. Ronco y me gusta la comida picante. Todo pérdidas. Y de nuevo Malasaña y sus garitos, recupero mi jersey rojo de rombos tan bonito regalo por mis 24 eneros ya no tan recien estrenados, de nuevos sus modernos que se creen Dios por conocer a un dj que te puede colar mientras el resto paga 15 euros. No amaneció, al menos no en el camino. Luego vendria una postfiesta con tequila, vodka del malo y una guitarra acustica sobre la que se me obligó a tocar Asturias de Albeniz. Yo lo intenté. Ves tu, el Across the Universe casi se parecía a la cancion verdadera. Y tras dormir poco, de tiendas por Fuencarral (que moderno de mierda queda esto) para terminar comiendo en el Bravas, al cual, le he cogido cariño. Conversaciones sobre cambiar el mundo. La certeza de que el mundo cambiará. Y aparezco casi improvisadamente en la fiesta cumpleaños de Adrian Usero y su Nana para dormir contigo donde cantaba tambien Carlos Siles autor de la musica de dicha Nana... La cercanía, la musica que te remueve por dentro. Y me emociono con Tobogan, con Baila Nena (es triste pero me da ganas de vivir, no pretendo intentar hacer entendible como me hace sentir) y descubro una cancion que ya habia escuchado hace mil en la Tertulia y se cruza en mi camino una cancion llamada De camino a casa de José Lemus. Y odio a cierta cantante de OT pero prefiero las empanadillas calientes a las frias. Y odio volver a casa, me pesan demasiado las despedidas. Deberia asesinar al que dijo aquello de que volver es el mejor de los destinos. Volver es una putada.



Y un lunes más, caida libre en esta montaña rusa. De nuevo a las 7 en pie y a las 8 en clase. De nuevo clases magistrales que no llevan a ningun punto en concreto. De nuevo ese profesor que va de culto por poner un cuadro de Da Vinci pero escribe cirugía con j una y otra vez y pronuncia la frase "esto esta en el Harrison" 20 veces al dia. Un horror. Suerte que la rotacion es por Cirugía Vascular. De nuevo quirofano, vestirme de verde, el olor a pollo frito y hacer magia. Y floto y me veo desde arriba, comento la jugada con la residente de Cirugia general y confio en un futuro haciendo aquello que me hace feliz hasta el punto de una felicidad egositamente extrema, porque uno deberia ser aquello que desea con todas sus ganas al levantarse cada agónica mañana, sí.

Hoy las practicas fueron en consulta de cirugia vascular. Palpa, pasa el ecografo por aqui, palpa los pulsos, habla en inglés con el paciente, sonríe, disfruta, ve tu vida por un agujerito. Este médico que me ha tocado en suerte es genial. Le gusta lo que hace y trata al paciente como lo que es: persona asustada que va al medico porque tiene miedo y/ o no problema de salud. Mañana será igual que hoy y pasado me voy de viaje. Ya no queda tiempo para nada. Oficialmente, no pisaré nunca más un quirófano siendo estudiante de Medcina. Da toda la pena del mundo, pero intentaré colarme en algun lado la semana que nos dejan libre en la rotacion de Preventiva. Luego vendria comida china al Sol, tomar el sol, hacer la fotosintesis un rato y sentarme a tomar cafe con la Alhambra al fondo. Veis? No tengo motivo para quejarme.

Ahora viene la chicha. Mi casera nos quiere echar del piso por impago. ??? Nos reclama facturas ya pagadas. La mujer ha buscado el telefono de nuestros padres aun no se como y se dedica a insultar a diestro y siniestro. De verdad, que mala vejez tiene esta señora. Intentamos que entre en razon pero nada. Que la tratamos mal, que no se esperaba esto. A ver, problemas desde el primer día. Un contrato que no termina de firmar nunca pero lo hizo aunque parece que no lo entiende. Que tenemos 10 dias para pagar cada mes y las facturas de luz y agua no llegan aqui. Si no llegan no se pueden pagar. Aun asi, las hemos pagado tras ir a Sevillana-Endesa y ver lo que nos corresponde. Ella exige que domiciliemos. Este piso que, logicamente, no esta a nuestro nombre. Ella que nos cortan luz y agua un dia de estos. Nosotros que ya no sabemos que hacer. Los hijos de la señora solo estan ahi para chupar del tarro. Que mala vejez tiene esta señora. La moraleja de todo esto es que cuanto mas tienes mas quieres, que el dinero nos volverá locos y que no por tener dinero se es mas feliz. Asi que que a nadie se le vuelva a ocurrir decirme que la Medicina Privada nos hará ricos. Yo no necesito artificios tales. Yo no se lo que necesito ( o si). Lo que quiero es que termine este curso, que dejen de agobiarme cada dia, que tenga tiempo. Que se pare esta nausea.
De alguna forma que aun desconocemos, todo tomará su curso e irá bien. Totalmente convencido.