domingo, 18 de febrero de 2007

Por el camino de los ingleses se puede llegar a donde tú quieras


Helicon: Hola, Cayo.
Caligula: Hola helicon.
H: pareces cansado.
C: He caminado mucho.
H: si, has estado fuera mucho tiempo(un silencio)
C: no era facil encontrarlo.
H: ¿el qué?
C: lo q yo queria.
H: ¿y q querias?
C:La luna (...) no he podido conseguirla (...)por eso estoy cansado..¡Helicon!
H: dime cayo.
C: piensas q estoy loko no?
H: SABES MUY BIEN QUE NUNCA PIENSO. SOY DEMASIADO INTELIGENTE PARA HACERLO.
C: Ya bueno. el caso es q no estoy loco, y hasta te dire q nunca he estado tan cuerdo. Sencillamente he tenido un anhelo imposible...no me gusta como son las cosas.
H: es una opinion bastante extendida.
C: cierto, pero hasta ahora no lo sabia.ahora lo se. no soporto este mundo. no me gusta tal como es. por lo tanto, necesito la luna, o la felicidad, o la inmortalidad, algo que, por demencial q parezca, no sea d este mundo...


El fin de semana...de lujo. De fiesta (eramos pocos, que parece que a todo el mundo le ha dado por irse a Cadiz este año aunque yo digo que estamos haciendonos mayores), descansando, tomando cafe tranquilamente, viendo alguna de las pelis atrasadas (el camino de los ingleses), me he comprado un libro (El curioso incidente del perro a media noche) y he empezado a leer otro (el siglo de los cirujanos). Ah, he ordenado mi cuarto que los ultimos días ya parecía una leonera y estoy pensando cambiar el escritorio de sitio porque como da a un gran ventanal me entretengo viendo la gente pasar y a la pareja de murcielagos que deben vivir en algun tejado cercano. Mañana empieza el nuevo cuatrimestre. Comienzo con rotación por Digestivo.

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